Cerro del Potosí

Título alternativo: Cerro de tu mamá


Recuerdo inocentemente cuando Kenji nos sugirió ir al cerro del potosí. Este "legendario" lugar, al parecer, era un cerro que se mostraba majestuoso en un altiplano, como un chipote en medio de la nada, pues. Al parecer tenía buena elevación y eso no era todo: hasta arriba había nieve. Obviamente yo me imaginaba un Caradhras tipo del señor de los anillos o algo así bien cool... y me imaginaba en medio de la nieve con la bicicleta.

Creo que también me imaginaba mujeres desnudas: para el caso hubiera dado lo mismo.

El punto es que de alguna manera u otra todo el equipo UCBT se convenció de asistir a la cita y aunque por ciertas razones ese día tan temprano por la mañana yo no quería ir, me llamaron y me convencieron de asistir. Fui solamente por la convivencia, porque al parecer, toooodo el equipo estaba ahí.

Creo que fue la primera y última vez que se logra algo así, jejeje... y todos me esperaban a mí, bueno.

Total que todo el recorrido fue una aventura y ya que llegamos, después de como 2 o3 horas de camino y como otras 2 de retraso mientras algunos se compraban mallas de abuelita en el wal-mart, observamos maravillados el famoso cerro... en efecto, estaba muy alto... y pues para pronto comenzamos a subir.

Y a subir.

Y a subir un poco más.

Y a seguir subiendo.

Al principio era divertido: el paisaje es entretenido y se ve la cima cada vez más cerca. Después de un rato te das cuenta de que eso que creías que era la cima en realidad no lo era y que hay otra cima atrás, y otra y otra, o simplemente no se parece acercar un poco más.
Comenzaba a obscurecer y ya calaba el frío cuando llegamos a un punto y decidimos regresar. Algunos habían lloriqueado desde mucho antes, muchos de seguro en los primeros kilómetros...

Eso sí, hasta donde llegamos, el paisaje era increíble y las condiciones meteorológicas le añadían valor. Pero también eso sí, había tanta nieve como mujeres desnudas. O sea, lamentablemente, nada... creíamos ver puntitos blancos hasta arriba, pero era ya algo muy frío y lejano, y ya nos habíamos hecho a la idea de regresar.

Kenji nos mintió.

Lo peor no era la decepción, sino que si ven en la foto, el camino estaba empedrado.. pero no cualquier empedrado, nooo señor: se trataba de un empedrado marca diablo con piedras picudas y salidas que hacían temblar toda la bici.. no recuerdo la última vez que me dolió tanto el trasero o las manos.. fue horrible! Todos estábamos hartos al llegar hasta al final y aunque la convivencia en los momentos de tensión durante un viaje de ciclimontañismo por lo general se vuelve más fraternal, todos estábamos hartos y pospusimos la carne asada para después.

Eso sí, no voy a olvidar todas las peladeces que dijo pepe de regreso en el carro, o javier usando una bolsa de basura como impermeable, o pepe nuevamente (les digo que es la estrellita del equipo XD :P) manejando cuesta abajo en el camino empedrado con una sola mano... obviamente se cayó no mucho después.

Sin embargo no peudo decir que yo en lo personal haya terminado molesto con Kenji.. en lo absoluto, me encantó la salida y sobre todo la convivencia que tuvimos, que por eso salí y eso obtuve efectivamente... ojalá el próximo año se repita algo similar, donde la paciencia y el temple de los integrantes de la Unión Ciclista Borregos Tec se vuelva a ver desafiada :D